sábado, 26 de noviembre de 2011

Fotos de un siglo

Desde Barcepundit. Las 75 mejores fotografías de la revista Life

martes, 22 de noviembre de 2011

Elecciones

Ya hemos elegido. A los que no nos van a representar a decir de algunos. Los mismos que auguraban niveles de abstención decimonónicos. No hay tal. Da lo mismo. El "pueblo" volverá a las calles a forzar la realidad esquiva. A pesar de lo de CIU.

Me centro ahora en asunto interesante. La falta de proporcionalidad de nuestro sistema electoral (aquí una idea de su funcionamiento).


Instructiva animación de El País sobre el funcionamiento de nuestra ley electoral


Los hechos son sangrantes para IU y UPyD.

Tomado de La información


Y cómo sería con el sistema mayoritario anglosajón



¿Es necesario el cambio? Complicada cuestión. Todo tiene sus pros y sus contras.

En principio, lo justo sería un sistema proporcional puro en circunscripción única. Esto es, reflejar lo que realmente quiere el ciudadano con lo cual se sentiría realmente representado. El miedo a sus deseos es lo que hizo a los padres de la patria durante la transición diseñar esta estructura que facilitaba mayorías estables. Algunos apuntan incluso que iba dirigido contra un amenazante entonces Partido Comunista. El recuerdo de la II República también debió de estar presente.

Pero, ¿es lo deseable?
Las contraindicaciones son varias: la gobernabilidad por la fragmentación de la Cámara (que se incrementaría al desaparecer la noción de “voto útil”) que llevaría a la necesidad de pactos constantes y cambiantes (mejor no mirar hacia Italia); el alejamiento, aún mayor, de la clase política de la ciudadanía (provincias enteras quedarían sin representación; se votarían largos listados en los que se conocen a los 3 primeros lo que, además, haría difícil las supuestamente deseadas listas abiertas).

Y por último. Esta reforma la debería refrendar el pueblo. ¿Votaría ese pueblo mayoritariamente por esa ley? Puede parecer sorprendente pero en Gran Bretaña han dicho que no a una reforma de sus sistema electoral.

El debate queda abierto. Cada país es un mundo en este sentido. Los hay con sistema mayoritario como los anglosajones, proporcional como el nuestro o el australiano aunque con principios diferentes (D'hont en nuestro caso y Droop en el de las antípodas) o mixto como el alemán que mezcla elementos del mayoritario y del proporcional con circunscripciones regionales al 50%.
Son muchos los artículos interesantes publicados. En politikon hay bastantes. Aquí uno.
Muy interesante resulta el siguiente artículo que plantea alternativas mixtas.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Más democracia

Un fragmento del editorial de El País titulado Un error colosal:
"Es cierto que los griegos no pueden aspirar a un mejor trato que el decidido en la reciente cumbre, que supone en principio la condonación de la mitad de su deuda pública en manos de la banca. Pero también lo es que resulta muy difícil hacer valer este tipo de argumentación en una votación binaria, esquemática y susceptible de toda suerte de demagogias populistas como un referéndum. Especialmente si al final los ciudadanos acaban votando no sobre una medida concreta, sino sobre dos años de sacrificios que han exasperado a la sociedad griega. La experiencia de otros referendos en países como Francia, Irlanda u Holanda ilustran hasta qué punto suele prevalecer el malhumor social sobre la discusión del asunto sometido a las urnas."

El pueblo y sus limitaciones a decir del medio. Habla de demagogias y de populismo como de sirenas que harán enloquecer al pueblo ignorante y sentimentaloide. La confianza en el pueblo. ¿Cuándo entonces?, ¿dónde queda el sentir del pueblo? Ahora no toca, parece. Veremos en unos meses. Y uno repasa lo escrito sobre el 15-M y se pierde con el medio. La democracia directa cuando interesa.

Es lo que tiene sentir la patria amenazada por el pueblo de otra patria. Y estar en el gobierno.

Y uno piensa que lo realizado por Papandreu es una huida hacia delante propia de un indignado irresponsable.